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viernes, 16 de diciembre de 2011

Angry Birds ¿la genialidad de lo simple o la estupidez humana?

Esa es una pregunta que me hago a mi misma desde el día que leí que el popularísimo videojuego Angry Birds alcanzó los 500 millones de descargas en sólo 2 años. Y que al menos más de docientos millones de personas alrededor del mundo pagaron por él.
¡A ver! reconozco ser una fanática de los personajes de Angry Birds y una jugadora que presume de sus puntos, de hecho en mi lista de regalos en Amazon los incluí casi a todos. Entre sus muchos logros también les reconozco uno muy particular: conseguir la atención de personas como yo que no nos gustan los videojuegos de ningún tipo y que jamás habíamos demostrado interés en alguno.

Pero dejando a un lado la subjetividad de mis gustos personales y los eufemismos, si nos centramos en lo más básico  ¿realmente es Angry Birds un buen juego? porque sin importar lo gracioso que me parezcan sus personajes, lo pegajosa que me resulte su música y sin importar la dificultad que en cada nivel debemos vencer, al final la temática es una sola: aves (sin alas para variar) que matan a cerdos, ¡y ya!. 

Sin embargo es todo un fenómeno. Pero presten atención a las siguientes estadísticas sobre el juego: 
  • Es la aplicación móvil más descargada en 79 países del mundo
  • Muchos de sus niveles ya han sido jugados 266.000 millones de veces cada uno
  • En tiempo, ya se han jugado 200.000 años del juego, lo que significa que en el mundo se está jugando Angry Birds una media de 300 millones de minutos a diario, de forma colectiva
¡Impresionante! ¿cierto?.  De Angry Birds, además de sus versiones para Mac, Windows, PSP, Symbian, WebOS, Playstation, HTML5, Blackberry, iOs y Android, ya tenemos peluches, ropa de dormir, medias, mochilas, loncheras, mascotas, bufandas, juguetes, disfraces, zapatos, etc. ¡Un fenómeno en ventas!

Hoy en día su marca tiene un valor de más 1,200 millones de dólares. Sí, con un juego donde todo el tiempo ponemos en una tira elástica a pájaros enojados que matarán a los cerdos y donde sin importar el nivel de dificultad del juego seguimos moviendo una tira elástica más al azar que por estrategia, para matar cerdos continuamente. 

Y así como matar cerdos es continuo en el juego, yo también continúo haciéndome la misma pregunta: ¿el éxito de Angry Birds pone a prueba la genialidad de lo simple o la estupidez humana...?  Pero mientras ustedes reflexionan sobre el tema, y yo continúo jugando Angry Birds (con...chale, desbloquear el nivel 12 del mundo 7 "Birday Party" me tiene al coger la loma) les dejo este video donde nada más y nada menos que la Orquesta Filarmónica de Londres, interpreta una versión clásica del soundtrack de Angry Birds, ¡exquisita interpretación! por cierto. 

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