Respuesta a la pregunta que todos quieren saber: ¿es más inteligente un usuario de iPhone que uno de Samsung?

Los científicos, analistas e investigadores que sienten respeto por su trabajo, suelen ser bastante rigurosos con las conclusiones de sus estudios. Pero toda esa rigurosidad es la que después los mercadólogos, bloguers, periodistas, fanáticos y opinadores en general, pasamos por alto cuando nos agrada o conviene otra conclusión. 

Con esto me refiero a un estudio que publica Redmondpie: "iPhone Users Are Younger, Wealthier and Generally Smarter Than Samsung Smartphone Users". 

¡No imaginan cuánta controversia auspició tal conclusión! Por ello, amigos y lectores de este blog me preguntan cuál es mi opinión sobre el tema. 

Pienso que es demasiado pretencioso leer una encuesta (leerse solo el titular y el final en el mejor de los casos), y fundamentar una conclusión básica con el siguiente titular: "Usuarios de iPhone regularmente son más inteligentes que usuarios de Samsung". ¡Y ya! ¿Y ya, así nada más? Pues no, ¿saben qué? no, eso no es lo que revela ese estudio.

Si nos apegamos a los resultados del estudio en cuestión (que puede consultarse detalladamente aquí),  lo que puede extraerse es una correlación entre compradores de iPhone y personas con alto grado académico, pero en cierto porcentaje más alta que la misma correlación que también existe entre usuarios de un teléfono marca Samsung y personas con alto grado académico. Tal como se evidencia en la siguiente gráfica. 

Científicamente ya está muy bien documentado que la correlación entre dos cosas no equivale a la causalidad de una tercera. Tomo como ejemplo el incremento de robos en hogares durante la pasada Semana Santa. 

¿Por qué se incrementaron los robos durante Semana Santa? Imaginen que para sustentar su causa, yo encontrara una aparente correlación entre estas dos variables: 

• Robos en hogares. 
• Más hogares vacíos durante Semana Santa. 

Y saltara a la siguiente conclusión: "Porque los ladrones que roban durante semana santa son más inteligentes". Deducción basada exclusivamente en qué, estos escogen robar cuando las familias dejan sus casas vacías por más tiempo. 

Nadie en su sano juicio aceptaría semejante resultado. Porque no toma en cuenta el efecto de terceras variables que pudieran contener la esencia de otras posibles causas de los robos, además, esto no solo sucede en semana santa. Otros datos evidencian que casi todas las épocas de vacaciones colectivas propician que familias completas salgan dejando su casa más expuesta a los robos.  Y aprovechar esto no es sinónimo de inteligencia. 

Iguales limitaciones veo en ese estudio, específicamente en la parte educativa, porque apenas utiliza como variables de control siete escalas que intentan relacionar el grado académico con la inteligencia. Pero sin siquiera tomar en cuenta otros datos sociodemográficos (como la edad en la cuál iniciaron y finalizaron dichos estudios, su índice académico, sus carreras, y el nivel socioeconómico del seno familiar de cada persona). La inclusión de estas variables, por ejemplo, podría revelar (o no) alguna correlación más directa entre el grado académico y la inteligencia de estas personas (basada en una tercera, cuarta o quinta variable). 

En fin, ¿quienes son los más inteligentes? 

Pues con lo difícil que resulta cuantificar la inteligencia (según afirman los científicos) algo tan irrelevante como si las personas que elijen un iPhone son más inteligentes que quienes eligieron un teléfono marca Samsung o viceversa, seguirá inconcluso. 

Entre tanto, utilizando como base las variables que han tomado para este estudio, se puede establecer una correlación estadística entre quienes eligieron una marca y sus diferentes grados de educación. Pero nada más. De ahí a  saltar a la conclusión de qué: "Usuarios de iPhone son más inteligentes que usuarios de Samsung", eso no veo cómo o en qué lo han sustentado. 

Por último, como el primer requisito para que una investigación tenga un criterio científico confiable, es que la fracción de la muestra que se tomó conserve la misma homogeneidad de la totalidad de la población que se pretende analizar. Si acaso alguien se atreviera a tomar en serio cualquier correlación estadística en este estudio, entonces debe suscribirse exclusivamente a la población estadounidense y jamás para englobar usuarios de otro país en sus deducciones.  

Y ya como una exhortación final, tanto a los usuarios de un iPhone, como de teléfonos marca Samsung, LG, Alcatel, Motorola y demás, que han pasado los días luego de este estudio, discutiendo el tema en todos los foros, comunidades, redes sociales y comentarios de blogs, pienso que demostrarían mejor su inteligencia si invirtieran el tiempo en algo más importante que sustentarla por el teléfono que utilizan... con todo el respeto. 

En sí, no creo que la elección de un smartphone u otro, tenga capacidad por si misma para determinar si alguien en más o menos inteligente. Por Dios amigos, no se dejen embaucar por el marketing.  Abrazo a todos, ¡que la fuerza les acompañe!